El Consejo de Ministros ha aprobado un Real Decreto para la concesión directa de ayudas para la instalación de energías renovables térmicas, con un presupuesto de 150 millones de euros. Dicho de otro modo, bonificaciones de hasta el 50% de la instalación. Un tipo de descuentos que suele ser una media calculada para una familia de cuatro personas que aunque no gasten mucha electricidad, sí que quieren tener una reserva extra para evitar ir muy justos. Trasladado a algo más concreto, en su vivienda necesitan placas de unos 4.500 KW hora.
Traducido a inversión, en general, para viviendas unifamiliares el precio oscila “más o menos entre 5.000 y 7.000 euros”. Para comunidades de vecinos existe la ventaja de que hay precios más económicos si incrementamos el número de paneles. El ahorro obtenido en la factura energética varía en cada caso «dependiendo de diferentes opciones, con excedentes o sin excedentes, con o sin acumulación. Para esta familia el autoconsumo supondrá un ahorro de unos 35 euros al mes.
Estas ayudas, estarán vigentes hasta el 31 de diciembre de 2023 y serán gestionadas por las comunidades autónomas. Inicialmente se repartirán 150 millones de euros en base a criterios objetivos como el peso de los sectores en cada región, mientras que el presupuesto restante quedará para ampliaciones en función de la ejecución de los fondos iniciales. La subvención otorgada cubrirá el 70% de estos costes en el sector público y hasta el 45% en el caso de pequeñas empresas, y en ambos ámbitos se incrementará en un 5% en municipios de hasta 5.000 habitantes y municipios no urbanos de hasta 20.000 habitantes con núcleos de población de menos de 5.000 habitantes.